Más de medio centenar de personas de diferentes continentes, residentes en Cantabria, se dieron cita en el Auditorio ‘Los Carabelas’ en el santanderino barrio de El Sardinero, en una jornada de convivencia y diversión en la que se demostró, una vez más, que la diversidad nos enriquece y que a las personas nos unen más cosas que las que nos separan.
Durante el encuentro, las personas que conforman la base social del Movimiento por la Paz -MPDL- Cantabria, -voluntarias, asociadas, participantes en los programas y personal técnico-, pudieron disfrutar de la actuación del mago Julianini, de una degustación gastronómica de comidas de diferentes países aportadas por las personas asistentes, así como compartir música y bailes.
Al encuentro se sumó el Concejal de Inmigración, Cooperación al Desarrollo y Transparencia, del Ayuntamiento de Santander, Mateo Echevarría.
Las personas participantes dejaron por escrito mensajes por la Paz, en un día en que es fundamental recordar que la paz es un proceso positivo, dinámico, solidario y participativo y para lograrla es necesario fomentar el diálogo, el respeto a las diferencias y la cooperación mutua.
Construir sociedades más justas y pacíficas es posible.
